La próstata y la tercera edad

La próstata es una glándula ubicada en la zona que se encuentra debajo de la vejiga en la anatomía del hombre. Su tamaño es muy similar al de una nuez y la atraviesa la uretra. Esta, se encarga de conectar la vejiga con la parte exterior del varón, a través del pene porcionando el conducto por donde se evacua la orina.

Con el paso de los años, cuando el hombre comienza el proceso de envejecimiento, la próstata crece de tamaño y esto hace que comprima la uretra provocando algunos problemas conocidos como:

• El hombre necesita orinar con urgencia, especialmente por la noche.
• El chorro de la orina es más débil y menos abundante que antes, así como la fuerza con la que evacua la orinar
• El varón siente dolor ardor o infección urinaria
• Experimenta o sufre dolor en la espalda o en la cadera

Esta patología se llama Hiperplasia Prostática Benigna, se trata, por lo general con una intervención quirúrgica para retirar parte de la próstata y desobstruyendo la uretra. También existe la opción de someter al paciente a un tratamiento medicamentoso que impida el crecimiento de la próstata.

Existen otros crecimientos prostáticos que son en base a células malignas, con crecimiento celular desordenado que es el denominado Cáncer de Próstata. Los síntomas iniciales son muy parecidos a los anteriores como: dificultad para orinar, flujo de orina débil o interrumpido, urgencia frecuente por la noche, dolor de espalda o cadera.

Por esto es importante acudir a evaluaciones periódicas después de los 45 años.