Identificar la depresión en la 3ª Edad

La apatía y la tristeza tienden a adueñarse de las personas de la 3ª Edad, especialmente de aquellas que se sienten poco útiles o que han perdido cierta autonomía como consecuencia del deterioro físico o de alguna enfermedad, lo que puede llevarles a depresión. Hoy, desde Residencia Comunidad de Valencia, queremos recordaros qué aspectos se han de tener en cuenta para poder identificarla a tiempo.

Para ello, primero habrá que saber distinguir entre la tristeza que todos podemos sentir para no confundirla. No siempre estar triste de forma puntual es sinónimo de depresión. No obstante, hay síntomas que sí que lo son:

• La tristeza se prolonga más de lo normal (por ejemplo, por un periodo de más de 3 meses).

• Pérdida de interés por la vida en general, además de una notable incapacidad para disfrutar de las cosas que anteriormente le gustaban o satisfacían.

• Sufre constantemente una sensación de fatiga, energía y motivación que trasciende a lo físico.

• Se muestra más confundido/a u olvidadizo/a.

• Pierde apetito y se vuelve reacio/a al aseo diario.

• Deja de sentir confianza en sí mismo/a, o se siente más torpe, inútil o incluso un estorbo para los demás.

• Problemas para dormir, irritación y mal humor.

• Se aísla de los demás y le molesta mantener contacto con otras personas.

• Manifiesta pensamientos suicidas y expresa el poco sentido que tiene su vida.

Todos estos puntos que os hemos comentado, ayudan a identificar un posible problema de depresión en nuestros mayores en el que podemos ayudarles, no sólo haciéndoles ver lo contrario, sino contando también con ayuda profesional en caso de ser necesario.