Consejos para cuidar la piel de los ancianos durante el verano

El cuidado de la piel en personas mayores durante el verano es crucial para prevenir problemas como la deshidratación, las quemaduras solares y la aparición de manchas o infecciones. La piel envejecida es más frágil y sensible, por lo que requiere cuidados especiales para mantenerse saludable en los meses más calurosos. Hoy, desde Residencia Comunidad de Valencia, os hablamos de ello.

Consejos para cuidar la piel de los ancianos durante el verano

- Protección solar diaria: La piel de los ancianos es más delgada y menos capaz de reparar el daño causado por la exposición al sol. Es fundamental aplicar un protector solar de amplio espectro con un factor de protección solar (FPS) de al menos 30, incluso en días nublados. La aplicación debe realizarse cada dos horas y después de nadar o sudar. Además, es recomendable que las personas mayores usen ropa ligera de colores claros, sombreros de ala ancha y gafas de sol para una protección adicional.

- Hidratación constante: La piel tiende a secarse con mayor facilidad en los ancianos, especialmente en verano. Para evitar la sequedad, es importante mantener una buena hidratación, tanto interna como externa. Beber suficiente agua es esencial, así como usar cremas hidratantes específicas para pieles maduras. Estas cremas ayudan a retener la humedad en la piel y prevenir irritaciones.

- Evitar el calor extremo: La exposición prolongada al sol puede causar golpes de calor y deshidratación, que son especialmente peligrosos para los ancianos. Es preferible que las personas mayores eviten salir durante las horas de mayor radiación solar, entre las 11 a.m. y las 4 p.m. En su lugar, es mejor realizar actividades al aire libre en las primeras horas de la mañana o al final de la tarde.

Siguiendo estos consejos, puedes ayudar a proteger la piel de los ancianos durante el verano, asegurando que disfruten de esta estación sin riesgos para su salud.